El EZAPAC, a la cabeza en la innovación de material, busca aumentar su capacidad de combate nocturno
Personal del EZAPAC ha probado múltiples dispositivos con el objetivo de buscar la adquisición de equipos que mejoren la actual capacidad de combate nocturno y todo tiempo de los equipos operativos del escuadrón y de otras unidades.
Y es que el Escuadrón de Zapadores Paracaidistas (EZAPAC) es la única unidad terrestre del Ejército del Aire y del Espacio en cuyos cometidos se especifica el “efectuar las pruebas de material y equipos de combate que se determinen”.
Chalecos, cascos, cinturones, fusiles de asalto, pistolas, ametralladoras, lanzagranadas, vehículos tácticos, camuflajes, sistemas no tripulados… siempre que se detecta una necesidad de mejora e innovación en el ámbito de combate terrestre del Ejército del Aire y del Espacio, allí están los operadores del EZAPAC para valorar su utilidad y eficacia.
Es lo ocurrido en las últimas semanas en distintos campos de maniobras de la geografía nacional, donde personal del EZAPAC con amplia experiencia en este ámbito ha probado múltiples dispositivos con el objetivo de buscar la adquisición de equipos que mejoren la actual capacidad de combate nocturno y todo tiempo de los equipos operativos del escuadrón y de otras unidades.
Entre otro mucho armamento y material testado o de reciente incorporación, caben destacar los visores nocturnos para los lanzagranadas contra-carro C-90 de la empresa española Instalaza, material para apertura de brechas, visores para lanzagranadas y los optrónicos con capacidad de visión nocturna y térmicos montados sobre distinto tipo de armamento colectivo como las ametralladoras ligeras, medias y pesadas. Estas últimas probadas en misiones de protección sobre la última versión del vehículo táctico URO VAMTAC ST5 BN3, del cual el EZAPAC ha recibido recientemente nuevas unidades, aumentando la flota de dicho modelo que el EZAPAC tiene actualmente desplegado en misión real en zona de operaciones.
Aunque el EZAPAC ya contaba con otros sistemas de combate nocturno, el perfeccionamiento de estos sistemas y la inclusión de otros nuevos en el mercado potencian sustancialmente esta capacidad y la protección del personal. Las nuevas amenazas obligan a que esta unidad esté constantemente en busca de nuevos equipos para mantenerse a la vanguardia en cuanto a capacidades de combate, elemento clave para las unidades de Operaciones Especiales y mantener la seguridad de los soldados en cualquier lugar del mundo, misión cardinal de las Fuerzas Armadas españolas.