Una vez más, Zaragoza ha sido el escenario de uno de los entrenamientos tácticos avanzados más exigentes del año en Europa, consolidándose como un referente en la preparación operativa de tripulaciones aéreas.

Este ambicioso ejercicio ha contado con la participación de aeronaves de transporte táctico de España, Alemania, Dinamarca, Rumanía, Polonia y República Checa, incluyendo modelos como el A400M, C-130J, C-27J y C-295. Además, ha sido posible gracias a la implicación de unidades clave del Ejército del Aire y del Espacio como el Ala 31, Ala 35, Ala 15, Ala 14, Ala 23, CINTAER, AOC, EADA, ETESDA, EMP, CECAF, GRUNOMAC, GRUCEMAC, ACAR El Prat, CIGES, Agrupación Base de Zaragoza, Enfermería del MAGEN, EZAPAC, BRIPAC y la batería Mistral del RACA 20 del Ejército de Tierra. Su trabajo conjunto ha permitido construir un escenario táctico complejo que desafió a las tripulaciones, aportando un altísimo nivel de realismo y valor operativo al entrenamiento.

Con innumerables misiones realizadas en zonas como Ablitas, Bardenas, San Gregorio, Teruel, Garray, Huesca, Villanubla, aeródromo Tardienta, Torremocha, Lumbier y Santa Cilia, este entrenamiento ha vuelto a demostrar su importancia en la formación de tripulaciones altamente capacitadas, reforzando su capacidad de respuesta ante situaciones críticas y elevando el nivel de preparación en operaciones de alto riesgo.

Los participantes han subrayado la alta exigencia del curso, reconociendo el valor de una experiencia que proporciona una preparación realista y efectiva para afrontar situaciones de riesgo en escenarios hostiles. A lo largo del programa, se han puesto en práctica tácticas, técnicas y procedimientos clave para maximizar la supervivencia y la eficacia operativa en entornos de conflicto.

En esta edición hemos contado con la visita de Su Majestad el Rey de España, quien ha podido comprobar de primera mano el entrenamiento táctico que reciben las tripulaciones nacionales y europeas. Su Majestad participó activamente en una de las misiones, volando junto a las unidades en un A400M del Ala 31 y experimentando las dificultades que deben solventar las tripulaciones en operaciones simuladas que recrean con gran fidelidad escenarios reales y hostiles.

El Ejército del Aire y del Espacio reafirma así su compromiso con la excelencia y la preparación de su personal, garantizando que las tripulaciones adquieran un mayor grado de capacitación, al contar con nuevas herramientas para afrontar con éxito escenarios tácticos complejos.